16 febrero 2008

El cuento recomendado II

Este es un cuento que siempre me gustó y que tengo fresco en la memoria a la hora de escribir sobre intrigas y persecuciones. Para no copiarme, claro. Pero, ¿cómo evitarlo? Es tan bueno: Nunca trabajes para un extraño, de Raúl Alzogaray (Argentina).

¿Qué me gustó del cuento?
Tiene un ritmo genial, de similar tenor al Informe sobre ciegos de Sábato.

¿Dónde está el gancho?
En el manejo de la información que se le brinda al lector: en dosis justas, e incluso, insuficientes. Genera ansias de saber qué pasará.

Detalles importantes:
Nótese el uso de oraciones cortas en el momento crucial del relato que le otorgan una vertiginosa velocidad a los acontecimientos.

El clásico recomendado: Doy derecho a réplica con La llamada de Cthulhu, de Lovecraft.

¿Qué me gustó del cuento?
La atmósfera siniestra y la fluidez del relato.

¿Dónde está el gancho?
Tras una larga introducción -que puede inducir al rechazo- nos encontramos con el culto a Cthulhu y desde allí el relato navega a la perfección.

Detalles importantes:
Lovecraft gustaba detallar a sus creaturas para dotarlas de consistencia. Al hacerlo no dejaba nada librado a la imaginación del lector -que es algo supuestamente criticable-, pero más de uno convendrá conmigo en que a veces es un verdadero acierto hacerlo.

13 febrero 2008

El cuento recomendado I

Periódicamente iré recomendando y analizando cuentos que me hayan gustado -y estén disponibles en la red- con la ambiciosa idea de mostrar un panorama de la literatura fantástica en castellano que se escribe hoy en día.

Recomendaré sólo uno de cada autor para tener así un abanico más amplio.

Para comenzar te propongo deleitarte con: Los Desprendidos, de Félix J. Palma (España)

¿Qué me gustó del cuento?
Ya lo vas a ver...

¿Dónde está el gancho?
En todas partes. Desde que empieza hasta que acaba.

Detalles importantes:
La idea puede haber desfilado por la mente de muchos, pero dificilmente se pueda expresar mejor.


El clásico recomendado: There are more things, escrito por Borges y publicado en El libro de Arena en el año 1975.

¿Qué me gustó del cuento?
Lo atractivo que resulta leerlo y la sutileza del final.

¿Dónde está el gancho?
En las misteriosas refacciones que deben hacerle a la casa del tío del protagonista. Nótese que con pocas frases se logra dar a entender que lo que se quiere hacer es una aberración.

Detalles importantes:
Borges lo dedica a la memoria de H.P. Lovecraft, a quien, sin embargo, no consideraba un erudito en la materia, sino, como lo dice en el prólogo de El libro de Arena, como un "parodista involuntario de Poe".
Se dice que escribió este relato a modo de reto personal o quizás sobrando la técnica de este ilustre escritor del terror materialista de principios del siglo XX.